Revista El Economista - Julio 2019
necesario, mas no suficiente para el desarrollo pleno del país”, subraya Recinos. Retos fiscales “Las calificadoras de riesgo, en general, han puesto de forma positiva, cali- ficando bien la macroeconomía, el ma- nejo de política monetaria y la política fiscal. Pero igual han puesto el dedo en los indicadores sociales, en parte, del por qué no nos han calificado mejor, pues consideran, entre otras cosas, que los ingresos fiscales todavía son muy bajos para atacar esas brechas sociales”, comparte el presidente del Banguat. Enfrentar la erosión constante en la recaudación de impuestos y mejorar la gobernabilidad y la fortaleza institu- cional son algunos de los desafíos que tiene la administración entrante, indica la agencia de riesgo país Fitch Ratings en su análisis luego de las elecciones generales en junio pasado. De acuerdo con la calificadora, los ingresos del Gobierno disminuyeron a 10.5 % del PIB en el primer trimestre de 2019 y prevé que estos sigan dismi- nuyendo hasta 2020 ante la falta de una reforma fiscal integral, otro de los de- safíos para el nuevo gobierno. “El débil desempeño de la recau- dación de impuestos es el resultado de altos niveles de evasión fiscal, desafíos institucionales en la autoridad tribu- taria y un débil control de la corrup- ción”, enfatiza la casa calificadora. También refiere que la baja recau- dación de impuestos y un presupuesto rígido en más del 90 % del gasto de Gobierno ya destinado limita la in- versión pública. La deuda pública sigue reclamando su lugar ante la imposibilidad de que la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) logre alcanzar la meta de recaudación prevista de $8,460.5 mi- llones aproximadamente. Sin embargo, para el próximo año, el ente recaudador se plantea una meta más alta: $8,814.8 millones, una proyección estimada den- tro del escenario más conservador. La misma “es respaldada por la im- plementación de la factura electrónica, el Registro Tributario Unificado (RTU), el fortalecimiento de los controles adua- neros y el mecanismo de verificación insti- tucional con déficit del 2.4 %, que es algo de lo recomendado por el Fondo Monetario In- ternacional (FMI)”, indica el ministro de Finanzas Públicas y presidente del Di- rectorio de la SAT, Víctor Martínez. Y aunque la carga tributaria sea una de las más bajas de Latinoamérica (se ubica en 9.75 %), el jefe de la cartera del tesoro agrega que el presupuesto pro- yectado para 2020 alcanza los $12,080 millones aproximadamente, el cual bus- ca tener un planteamiento prudente para que el siguiente gobierno pueda tener un inicio ordenado. A criterio del presidente de la Fun- dación para el Desarrollo (Fundesa), Juan Carlos Paiz, pese a los esfuerzos por mejorar los ingresos fiscales y me- jorar la inversión pública, especialmen- te en carreteras, los temas estructurales financieramente siguen siendo una de- bilidad en el país. “No se puede dar presupuesto a todos los que lo piden y no se puede bajar la inversión pública por ese aumento de gasto sin mejorar los ingresos fiscales”, subraya. En cuanto al comportamiento de los sectores productivos, la construcción muestra signos de reactivación, con- trario a los industriales, cuya produc- tividad sigue bajando (en el primer trimestre del año cayó 6 % con respecto al mismo período 2018), similar a la situación del sector cafetalero, de peso en la generación de empleo, pero cuyos precios continúan deprimidos. Losgrandespendientes Para los analistas entrevistados por “La IEDse ha venido reduciendo enmás omenos 3%anualmente. Estamos atrayendo $1.3 billones cuando el resto de la región comoCostaRica tiene $5 billones”. JUANPABLOCARRASCO, presidente de laAMCHAM 58 • El Economista www.eleconomista.net Julio - Agosto 2019 • Anivel macroeconómico, el primer retodel país es el crecimientode la economía. Las proyecciones indicanque será del 3.4%, mayor que en 2018, pero insuficiente. EL ECONOMISTA/ENRIQUE CANAHUI TEMAPAÍS GUATEMALA
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