Revista El Economista - Julio 2019
CARLADEVANEGAS Vicepresidenta de SEARCHiN El Salvador Carla deVanegas fueuna de las fundadoras de la primera bolsa de trabajo en línea enCentroamérica. Es una empresaria audaz ypionera en cada reto que se propone. P OR : M ARÍA J OSÉ S AAVEDRA . F OTO : C ORTESÍA “ Nuncamevinimesentíqueeradiferentecuan- do inicié mi trabajo. Sabía que debía aprender, meterme en todo, ganarme la confianza, ir con- tra corriente. Desde que inicié sabía que tenía que romperparadigmas”, diceCarladeVanegas, vicepre- sidenta de SEARCHiN y fundadora de la primera bolsa de trabajo en línea en Centroamérica, la reco- nocidaTecoloco.com. De Vanegas es una empresaria con una visión decidida desde que inició su carrera como pasante de Sistemas enXerox Corporation, en soporte téc- nico, hasta el momento que se lanzó como em- prendedora junto a dos mujeres más: Tika Quiñó- nez e Irene Bustamante. Suobjetivoprofesional se fuematerializando y se convirtió en una empresaria exitosa que rompió pa- radigmas. Paramuestra una empresa: Tecoloco.com naciócuando lapenetraciónde internet no superaba el 3%enel país yen losprimerosmeses solo recolec- taron 1,000currículos; pero enocho años la empresa se vendió con un banco de 750,000 hojas de vida y conpresencia en cinco países. Actualmente, lidera a SEARCHiN un referente en nueve países para identificar el talento humano que va conel ADNde cada empresa. Además es parte deotrascompañíascomoJoven360,HeralthyCoyla más recienteRed Sofa. Pero aunque ha roto esquemas en unmundo con grandes brechas de género, De Vanegas considera que esto nunca fue una limitante en sus objetivos. “Hemos avanzadomuchísimo en la brecha de gé- nero en el mundo empresarial. Pero aún esmenor la participación de las mujeres. Yo desde que inicié en miprimertrabajo,allíéramossolotresmujeres,pero yonunca vi eso comouna limitante, loque sí hice fue hacer el trabajo que cualquier hombre podía hacer”, recuerda. Sin embargo, como una experta e inmersa por completo en el mundo del talento huma- no, sí lamenta que las mujeres no se prepa- ren en carreras técnicas, que son las más demandadas, y al contrario estén optan- do siempre por las humanísticas, siendo este un factor que incide al momento de participar en el mercado laboral actual. “Sí hayempresas quequie- ren contratar mujeres, pero no las hay con la pre- paración requerida”, lamenta. De hecho, relata que algunos centros de educa- ción superior han observado que del 100 % de las mujeres que inician en una carrera técnica, el 70% se cambia a una carrera humanística al año. Entre otros retos que identificapara lasmujeres de cara a su rol profesional es que la realidad familiar mu- chas veces limita su crecimiento, principal- mente porque el cuido de los hijos y el trabajo doméstico siguen siendo res- ponsabilidad de lamujer. La experiencia para De Vanegas con el trabajo la ha llevado a ver en este una transformación, por el contacto con la gente, en especial conlosjóvenesqueiniciansusca- rreras que tienen sueños y “se quieren comer elmundo”. • “Desde que inicié sabía que tenía que romper paradigmas” PORTADA MUJERES ALPODER 38 • El Economista www.eleconomista.net Julio - Agosto 2019 Visión: Carlade Vanegas tiene una trayectoria demás de 30 años y llama a “no traicionarse ydefinir laper- sonaquede- seas ser y ver en las relaciones unelemento importante”.
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