En septiembre pasado, la MCC mo-
dificó los criterios de elegibilidad. Para
que un país sea candidato a recibir los
fondos tiene que, entre otras cosas,
aprobar al menos la mitad de 20 in-
dicadores, donde uno de los más im-
portantes es el relacionado al control de
la corrupción.
Después de evaluar a los Estados
candidatos, la MCC catalogó a El Sal-
vador como un país apto para suscribir
un nuevo compacto y a Honduras como
un país elegible para un programa um-
bral, con el que se fortalecerían los
índices que no permitieron clasificar
para los programas más grandes.
Según con el informe Selección de
Países Elegibles de la corporación, con
base con una recopilación de índices de
terceras instituciones, Honduras pasa
16 de los 20 indicadores, pero tuvo una
calificación por debajo de la media en el
control de la corrupción.
Transparency International en su
Índice de Percepción de la Corrupción
de 2011, ubica a ambos países en po-
siciones de altos niveles de corrupción.
Para el caso de Honduras se posiciona
en el número 129 con un indicador de
2.6 (en una escala de 0 a 10, donde el
mayor número representa más trans-
parencia). El Salvador se colocó en el
puesto 80 con 3.4.
Pese a que Honduras no pasó este
indicador, la corporación destaca en su
informe que este país “fue un buen socio
y completó con éxito el compacto (pro-
grama) en 2010”, y destaca que el Go-
bierno, desde la crisis política de 2009,
ha tomado una serie de importantes
medidas para restablecer la trayectoria
positiva del país, en particular, la adop-
ción de medidas para mejorar el control
de la corrupción a través de una mayor
transparencia fiscal.
El programa hondureño, firmado
por $215 millones, culminó en sep-
tiembre de 2010. Estos fondos fueron
invertidos en el crecimiento económico
del sector agrícola, incluyendo la asis-
tencia a los agricultores, acceso al cré-
dito y la rehabilitación de la carretera
principal que conecta el país con los
mercados internacionales.
Por su parte, el Fomilenio sal-
vadoreño se firmó
en 2006 por un
monto de $461 mi-
llones para invertir
en educación, ser-
vicios públicos, pro-
ducción
agrícola,
desarrollo empresa-
rial rural e infraes-
tructura vial en la zona norte del país.
Este macroproyecto finaliza en sep-
tiembre próximo.
En el informe, la corporación señala a
El Salvador como “un país orientado a la
reforma con una democracia fuerte y las
políticas de inversión favorables”; asi-
mismo destaca que a lo largo del primer
programa el país siempre ha demostrado
un compromiso de tomar acciones po-
sitivas en la búsqueda de reducción de la
pobreza y el crecimiento económico.
Pero El Salvador ha mostrado estan-
camientos en algunos indicadores. El se-
cretario técnico de la Presidencia y pre-
sidente de la Junta Directiva del Fondo del
Milenio de El Salvador (Fomilenio), Alex
Segovia, dice: “Hay indicadores mucho
más difíciles de mover. El tema de edu-
cación y el de salud son muy difíciles
porque reflejan tendencias estructurales y
estas no cambian de un año para otro”.
Desde antes que la corporación pu-
blicara la selección de la candidatura de
El Salvador en diciembre pasado, el país
ya preparaba una propuesta centrada en
impulsar la economía de la zona costera.
“Allí se cumplen las condiciones fun-
damentales: pobreza y exclusión, pero
también muchas potencialidades pro-
ductivas”, señala Segovia.
La propuesta se presentará en abril y,
de ser aceptada, beneficiaría a 75 mu-
nicipios de la zona, particularmente al
puerto de La Unión y la bahía de Ji-
quilisco, dijo el presidente salvadoreño,
Mauricio Funes. El mandatario también
adelantó que el plan abarcaría desa-
rrollar el potencial tu-
rístico y marítimo, ha-
cer de esta región un
centro logístico de
servicios e impulsar la
pesca, la acuicultura y
la agricultura.
Según Ruddy, la
propuesta deberá presentar estudios de
factibilidad que puedan justificar la otor-
gación de los fondos y asegurar su pro-
vecho. Además, señala que el deseo de la
corporación para este proyecto, com-
partido por el Gobierno, es enfatizar
hacia un apalancamiento de la inversión
privada. De ser aprobada la propuesta, la
firma de convenio podría desarrollarse
en los últimos meses de 2012.
Segovia dice que los fondos que se
aspiran a obtener son, como un “deseo
país”, de un monto similar al primer
compacto. Por su parte, Ruddy señaló
que por ser una nación de renta media
baja El Salvador podrá obtener como
máximo un 25% del presupuesto de la
entidad, el cual aún no se ha acordado.
Unprogramareferente
Fomilenio de El Salvador se posiciona
como un referente en la conceptua-
lización de los programas de impulso al
desarrollo, señala Ruddy, quien además
destaca que los $461 millones “permiten
pensar en grande, en la transformación
del quehacer de una región entera”. Este
monto ha tenido una contrapartida del
Gobierno por $327 millones.
Pese a retrasos en los primeros años
del programa, debido al desarrollo de
estudios y acomodos del plan preli-
minar, la ejecución de Fomilenio está a
tiempo, habiendo comprometido un
99% del monto en contratos.
Entre los resultados, Fomilenio ma-
neja que durante los cuatro años 61,356
hogares cuentan con mejores condi-
ciones de vida.
Pero más que los resultados ob-
tenidos, el director ejecutivo de Fo-
milenio, José Ángel Quirós, señala que
la sostenibilidad posterior del programa
es fundamental. “Si al final no logramos
cambiar vidas y generar oportunidades
que den la sostenibilidad, de nada sirve
toda esta inversión.”
•
“Si al final no logramos cambiar vidas y
generar oportunidades que den la
sostenibilidad, de nada sirve toda esta
inversión (en la zonanorte).”
JOSÉÁNGELQUIRÓS,
director ejecutivode Fomilenio
$779.5
millones son los
fondosbrindados
aCentroamérica
por laMCC.
El Economista
www.eleconomista.net
Enero - Febrero 2012
• 69