El Economista - Noviembre de 2023

La asignatura pendiente de la IA: programar robots con más ética La Web Summit de Lisboa discutió los campos en los que la Inteligencia Artificial se está incorporando, pero también aquellas áreas en las que su llegada requiere de mucha ética. P OR : EFE • L I SB OA La inteligencia artificial (IA) puede servir para volver más eficientes tanto los sectores productivos como las artes, coincidieron e varios expertos en la Web Summit de Lisboa, pero todavía es necesario marcar el sistema ético para que no se vulneren los derechos de las personas. La clave está, defendieron en varias charlas, en un perfeccionamiento de la tecnología ya en funcionamiento, que logrará resultados más potentes. Ética para gestionar a los robots Esta fue la principal bandera de Janet Adams, la directora de Operaciones de SingularityNET, una empresa centrada en desarrollar la “inteligencia general artificial” (AGI, por sus siglas en inglés) para lograr generar algoritmos que estén al nivel intelectual del ser humano. Acompañada de Desdemona X, una androide de largo pelo lila diseñada por su compañía y que funciona con inteligencia artificial, espera lograr perfeccionar esta tecnología esta década y cambiar con ella las actuales estructuras de poder y financieras del planeta y mejorar la calidad de vida de las personas. “Hay grandes problemas de desigualdad estructural en nuestro planeta y los humanos no los están solucionando. Mi gran esperanza es que los robots y la AGI puedan traer un mayor nivel de ética y de consideración para las necesidades de los otros, para que las tecnologías del futuro sirvan a las necesidades de la mayoría”, expuso Adams. Para alcanzarlo, continuó, es necesaria una “regulación clara” y descentralizar la inteligencia artificial, para que se nutra de la mayor cantidad de gente posible, “de todas las razas, países, edades, orientaciones sexuales, géneros”, que alimenten al algoritmo “con ética y normas de todas las partes del mundo”. Ética para regular la IA en las artes del entretenimiento Otro sector en el que también destacaron el componente ético es en la aplicación de la IA en la producción de las industrias creativas. El especialista Matthew Blakemore señaló que la inteligencia artificial sirve a las empresas del entretenimiento para mejorar sus beneficios con el diseño de mejores ofertas de consumo, pero matizó que existen dudas sobre cuál es el límite en la recolección de datos de los usuarios para diseñarlas o el riesgo que supone para los empleos del sector. “Si pensamos en las preocupaciones éticas, la cuestión que no recibe luz verde aquí es hasta qué punto llegar en la recopilación de datos personales para realizar recomendaciones”, apuntó.• TECNOLOGÍA INTELIGENCIA ARTIFICIAL •La inteligencia artificial puede perfeccionarse con más ética. EL ECONOMISTA/CORTESÍA “Mi gran esperanza es que los robots y la AGI puedan traer un mayor nivel de ética... para que sirvan a las necesidades de la mayoría”. JANET ADAMS, directora de Operaciones de SingularityNET 2 ,6 0 0 empresas emergentes discutieron sobre tecnología en Lisboa. 86 • El Economista www.eleconomista.net Noviembre - Diciembre 2023

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