El Economista www.eleconomista.net Marzo - Abril 2022 • 23 favorable sobre el cumplimiento del programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI) dado que se espera que se cumplan los objetivos fiscales planteados. “Las plazas destacarán según las condiciones propias de cada país. La resiliencia de los bancos a los ‘shocks’ internacionales, y el manejo interno de la pandemia será fundamental para la recuperación de los sectores. Entre los mercados que podrían mostrar un mejor desempeño está Costa Rica, favorecido por un entorno económico más estable”, proyecta Barquero. Proyecciones Para 2022 el panorama pinta nuevamente retador para las entidades financieras de Costa Rica. Un informe de la agencia S&P indica que el “lento crecimiento” del PIB y la pandemia afectarán la calidad de los activos, las altas reservas para pérdidas crediticias reducirán los resultados netos y rentabilidad de los bancos y “el debilitamiento más profundo” de la calidad de activos se verá “aún más afectado” durante primera mitad de este año. “Las condiciones crediticias seguirán deprimidas para 2022 con alto desempleo, lo que continuará obstaculizando las carteras de crédito al consumo”, detalla el documento. En efecto, Costa Rica se mantuvo en 2021 como uno de los países con más alto nivel de desempleo de la región. Según el informe Panorama Laboral 2021 de América Latina y el Caribe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Costa Rica tuvo un promedio de 17.4 % en la tasa de desocupación en los tres primeros trimestres del año anterior. Para este 2022, se proyecta un desempleo del 17.1 % en el país centroamericano, casi el triple del resultado promedio esperado para el mundo, que es de 5.9 %. Aunado a esto, Barquero dice que la creciente inflación podría ser factor de riesgo para las entidades bancarias debido a la presión que se ejercería en el margen de intermediación. Asimismo, un crecimiento inesperado de las tasas de interés, puede debilitar la dinámica del crédito. El reporte de S&P, indica que espera que los activos improductivos continúen en máximos de 3.5 % (totalmente cubiertos por reservas) y que el costo del riesgo en el sistema costarricense se mantenga por encima de 1%durante los próximos dos años. “Dado el retiro de las medidas de apoyo del regulador y los bancos para ayudar a los clientes en la pandemia, consideramos que los activos improductivos aumentarán en la primera mitad de 2022 y se estancarán durante el resto del año. Esto ampliará los riesgos y las pérdidas crediticias, lo que presionará la flexibilidad financiera del sistema”, reza el documento. Debido a que se observa “una disminución constante” de la rentabilidad del sistema bancario, consideran que la rentabilidad “seguirá moderada” a medida que los bancos aumenten su costo de riesgo para mitigar los efectos en la calidad de activos. El tema de las finanzas públicas también tiene un efecto en la banca. Costa Roca tiene un déficit fiscal de 5 % y el monto de la deuda pública está por encima del 70 % del producto interno bruto. “La tendencia negativa del riesgo económico de la industria bancaria refleja las presiones en las trayectorias política, económica, fiscal y de deuda”, apunta S&P. • El país continúacon el procesode diversificaciónde la economía; locual, evidentemente beneficiaráal sector financiero”. GARYBARQUERO, gerentegeneral de SCRiesgo
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