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a integración del esfuerzo
de muchos puede conver-
tirse en una fuerza que su-
pere cualquier obstáculo y
llegue a nuevos destinos.
Ese es el ejemplo que demuestra
INTRADESA, un grupo empresarial sal-
vadoreño del sector textil con una línea
de producción integrada verticalmente
desde el área de hilo y telas, corte y
confección, planchado y empacado que
exporta la totalidad de su mercadería a
Estados Unidos a través de INTRATEX
de El Salvador, S. A. de C. V.
Tal es su crecimiento que el ranking
de la Gerencia de Inteligencia de la ASI
ubica a INTRATEX entre las primeras
exportadoras de este año.
Javier Simán, director ejecutivo de
INTRADESA, confirma que desde hace
muchos años se ha mantenido entre los
primeros cinco lugares por la buena
demanda que tienen de parte de re-
conocidas cadenas mayoristas.
Confeccionan productos de tejido de
punto como camisetas, suéteres, pants y
pueden producir unmillón de prendas a
la semana.
Sus orígenes datan de 1964, cuando
empezó la parte de producción de
hilos, y en 1992 arrancó la actividad de
confección.
INTRADESA está conformada ac-
tualmente por una planta de textiles,
seis de confección, una de corte y dos
centros de distribución para las ex-
portaciones.
Simán explica que anteriormente se
subcontrataba mucho a otras industrias
por acceso amaterias primas, pero ahora
realizan ellos mismos la producción y pron-
to completarán la cadena productiva.
Actualmente se encuentran ampliando
la planta de hilatura para elaborar las telas
que se importan y ya no depender de los
proveedores asiáticos para reaccionar de
forma más inmediata a los pedidos que
realice el mercado norteamericano.
Esperan concluir con las obras a prin-
cipios del próximo año.
Un conglomerado de estas dimensiones requiere de muchos
colaboradores. Por ello, sus 6,500 trabajadores la convierten en
el tercer mayor empleador del país.
Esta fuerza laboral ha sido duplicada en los últimos tres años
y también han abierto oportunidades para personas con
discapacidad, dijo Simán.
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